30/5/07

Casa de mala nota

Cada sábado aprovecho para hacer la compra semanal, y hablando con la gente de los diferentes puestos del mercado puedo extraer de las conversaciones una conclusión: la política es "una casa de mala nota"; es decir una casa dirigida por una dueña que obtiene provecho y que facilita los favores a quien lleva dinero en la mano. Una concepción de la política que está muy arraigada entre nosotros y que, día a día gracias a los representantes políticos que viven en ella encuentran más elementos de juicio para mantenerse "in aeternum". Para la gente de la calle no pasan desapercibidas las imágenes de políticos profesionales que en los últimos quince, veinte o veinticinco años no han dado un palo al agua. A muchos de ellos nadie les ha visto trabajar nunca en otra cosa que en mover los labios para emitir sonidos, muchas veces sin ningún sentido ni contenido.

Posiblemente, tras este largo periodo de tiempo, aún existan personas que crean que todos los partidos políticos del sistema pretenden el bienestar social, que quieren repartir las prosperidad, y que de esta distribución, legítimamente, sus responsables políticos no quieren autoexcluirse. Como no desean quedar excluidos, anteponen su prosperidad al reparto de una práctica diaria que jamás nos da pruebas de austeridad y autocontrol.

Tan solo es necesario analizar cualquier gestión pública partidista en este periodo de tiempo. Desde el momento que acceden al poder muestran una gran capacidad de adaptación y comienzan a disfrutar de un conjunto de placeres que antes creían tener vedados. Entre todos pagaremos sus gastos millonarios en viajes, comidas y tarjetas de crédito en los mejores hoteles, o el pescado y la carne más caros de las cartas de los restaurantes más afamados. Por ejemplo, y siguiendo con estos conceptos, una auditoria interna ha revelado un agujero de 300 millones en UGT, sindicato que recibe subvenciones de miles de millones anuales por parte del Estado.

Hacia una nueva dictablanda

No ha de sorprenderse nadie si afirmamos que vivimos en una democracia burguesa sometida a unos poderes fácticos y constitucionalmente tutelada por un poder militar que mantiene levantada, aunque escondida, su espada de Damocles. Y además los gobiernos de turno, populares o socialistas, señalan a la oposición –especialmente a los otros nacionalismos- lo que han de pensar y lo que han de decir, y si alguno habla del Jefe del Estado anatematizan su persona y su partido.

Es evidente que esto parece cada vez más una dictablanda.

Desde que el PP consiguió la mayoría absoluta el matrimonio de conveniencia entre CiU y el PP pasa por ciertas dificultades y sus relaciones se han hecho esporádicas en función del interés, la prepotencia y la arrogancia de unos y de otros. Sacando los trapos sucios justifiquen su distanciamiento que no ruptura, para continuar ganando votos contra cualquier hipotético frente político opositor hecho contra natura y deprisa.

El periodista José Martí Gómez ha escrito en "La Vanguardia" de Barcelona en referencia a las palabras de Aznar sobre el País Vasco y las responsabilidades del PNV en los asesinatos y atentados de ETAque "estamos en una fase de desinformación y de intoxicación por parte de todos". Sin duda, el PNV y el conjunto de nacionalismos periféricos lo tienen bastante crudo para explicar actitudes del presente y del pasado, pero ello no es obstáculo para reconocer que Aznar y los de su banda desde el mismo instante de la tregua unilateral de ETA, se van a dedicar a complicar de gran manera cualquier posibilidad de llevar a térmico el proceso de paz. Lo dijimos en su momento, existen múltiples intereses en rompen esta vía de paz por parte de los enrocados en el aparato del Estado, y lo volvemos a repetir una vez más que son centenares de miles de millones lo que mueve la lucha antiterrorista, y son miles de personas las que están implicadas. Además, mientras haya terrorismo asesino, la gran mayoría de la población no se hará preguntas que puedan afectar al conjunto de las instituciones del Estado, como por ejemplo las comisiones percibidas con cargo al petróleo importado de determinados países. Ciertamente, el oportunismo electoral del PP y también del PSOE, van a ir cerrando una a una todas las puertas que otros, con esfuerzos y Silencio, habían ido abriendo.

En la parte opuesta, la organización independentista ETA rompió la tregua al objeto de mostramos su capacidad operativa y forzar así conversaciones más serias con el gobierno. Un gobierno en el que no están todos de acuerdo con la estrategia de Mayor Oreja de aislar al PNV al precio que sea. El tiempo pondrá a cada uno en su lugar y como dicen amplios sectores del País Vasco: "a mayor oreja, mayor bocaza".

Los del PP, como antes los del PSOE, están obsesionados con el control de los grandes medios de comunicación. Piensan que tan solo tendrán el trabajo completo si mantienen el actual estado de sopor que padece la población española y que les ha permitido de momento controlar la situación con la manipulación de la Opinión Pública. A cada bestialidad de ETA, el gobierno responde con su batería de plumíferos y negros de la escritura que transcriben literalmente las notas oficiales como si fuesen de su cosecha.

Así la interceptación de un coche bomba permitió escribir en agosto que éste serviría para cometer un gran atentado en Barcelona, pero en el mes de octubre nos dirán que el mismo coche bomba se pensaba utilizar para hacer volar el ferri que enlazaba Valencia con Palma.

ETA sabe que, a cada salvajada suya, el gobierno coarta más y más las posibilidades de expresión de los sectores progresistas de las Españas, y que tan solo los que repiten la versión oficial tendrán derecho a un espacio en los grandes medios de comunicación. El control sobre cualquier noticia relacionada con las burradas terroristas es casi total, pero la profesionalidad de muchos periodistas nos permite acercamos muy ligeramente a una cierta realidad. "La vida del Portero -el fiscal jefe de Andalucía, asesinado por ETA- dice que su marido pidió escolta dos veces", según -El Periódico". Y su viuda, Rosario de la Torre, denunciaba el agravio que padeció su marido respecto al presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía: "tenían los dos el mismo rango. ¿Cómo se entiende que el presidente tuviese tres turno de escolta permanente y coche blindado desde hacía dos años y mi marido no?". A los escritos que en vida dirigió Portero en tal sentido, la policía le contestó que estaba incluido en las medidas de seguridad y contravigilancia que tenían organizadas.

Los medios inciden en que la organización independentista ETA ataca preferentemente a "servidores del Estado" como militares, Guardias Civiles, Policías, Fiscales y Jueces, Funcionarios de prisiones, Periodistas... Normalmente, son "servidores" sin ninguna clase de protección, como hemos visto en el párrafo anterior. Es bien triste ver como el neoliberalismo, tan enemigo de todo lo que signifique Estado, en su propaganda lo refiere todo al Estado. Los terroristas -dicen- atacan al Estado, pero los que mueren son las personas y no el Estado. El olvido de la sociedad civil es cada vez más evidente y queda reflejado en cada acto del poder donde la foto o los beneficios electorales son más importantes que los muertos y los heridos, cuyos familiares quedan, muy a menudo, sin ninguna de las ayudas que, en el momento de la tragedia, los políticos les habían prometido.

La situación presente, sin duda alguna, es la que deseaba tener el PP para desarrollar su nacionalismo centrípeto que lleva consigo la actual campaña de demonización de todos los nacionalismos centrífugos. Esta situación le permite al PP mezclar cada día su discurso antiterrorista con un discurso antinacionalista e, incluso, amenazar al PSOE en el supuesto de que diese soporte a la convocatoria de manifestación del lehendakari Ibarretxe bajo e! lema: "PAZ, ETA NO". Una manifestación a la cual no acudieron los miembros del Foro de Ermua. Otros expresaron su desilusión porque el lema no incluía referencias al dialogo con ETA y su entorno como única forma de buscar la paz.

El camino involucionista

La conservadora Internacional Demócrata Cristiana vive horas bajas en el mundo, asediada por escándalos de corrupción y por la defenestración de los cargos más progresistas, precisamente los que tienen un talante más conciliador que agresivo, ha sido el ámbito escogido por José Mª Aznar para atacar el nacionalismo vasco del PNV. El gobierno Aznar ha aprovechado esta situación para imponer la expulsión del Partido Nacionalista Vasco de la mencionada internacional dentro de su estrategia de aislamiento de cualquier persona, partido, institución y organización que se manifieste abiertamente en contra de la política conservadora del PP y de sus aliados. Su estrategia de conseguir como sea el gobierno del País Vasco va camino de generar un estado de crispación casi absoluta.

Hasta ahora, el ciclo económico había ayudado la gestión del PP, y así podían disimular una situación social con ligeras expectativas de futuro. Día a día, por ejemplo, aumenta el número de impagados y España ya no va tan bien como decían. Bancos y cajas restringen sus créditos hipotecarios, ya que disponen de largos listados de viviendas por vender. La negativa a rebajar los impuestos de los carburantes está llevando a una situación de inflación real muy por encima de las previsiones de los más negativos adivinos y que afecta a todos los sectores de la economía. La política de recorte de las prestaciones sociales que ha llevado a término el PP, no ha hecho más que comenzar. Ante la nueva crisis económica que se empieza a notar, el pensamiento del PP es muy claro: continuar con el integrismo económico y la insensibilidad social, la crisis -para el PP- la han de pagar las clases populares.

Como ya hizo el PSOE, el PP aprovecha a diario la excusa de la Unión Europea para limitar, en la práctica, las competencias de las comunidades autónomas. En su momento, el PP abogó por un sistema de financiación basado en la cesión de los impuestos especiales y, sin explicación alguna, reniega de él. El PP busca aliados para desarrollar su Ley de Extranjería, cuya aplicación muestra un preocupante racismo y xenofobia.

La amenaza de una profunda descohesión social no es ya una posibilidad más o menos próxima, es un hecho, y, solamente, el alud terrorista está permitiendo mantener un cierto objetivo común: la Paz.

(Publicado en El Federal núm. 6 - Octubre 2000)

No hay comentarios:

Publicar un comentario